ü Al iniciar el momento de la seducción, hay que dirigir la mirada sólo hacia la cara de la persona que nos interesa. Cualquier zona entre los hombros y las rodillas está totalmente prohibida, porque si no entramos en el terreno sexual y se termina el coqueteo inocente.
ü Aguantar la mirada un máximo de 4 segundos. Si nos pasamos la otra persona pensará que somos un chulo/a, que le estamos desafiando o que nos sentimos superiores.
ü La mirada tiene que ir junto con una sonrisa limpia y un gesto corporal natural para que sea más eficaz.
ü No lances miradas demasiado rápidas y repetidas o la otra persona pensará que pasa algo raro y lo más seguro es que se mosquee.
Algunas miradas y gestos que acaban con el coqueteo inocente:
- Guiñar un ojo junto con una media sonrisa.
- Abrir demasiado los ojos y mojarnos los labios con la lengua.
- Arquear las cejas y poner morritos.
- Abrir la boca, mostrar la lengua y apoyarla en el labio superior.
Clases de mirada:
-Mirada intensa: recorrido desde los ojos hasta las cejas. Es la más aconsejable para los momentos íntimos.
-Mirada amistosa: recorrido desde los ojos hasta el labio inferior. Llamada amistosa.
-Mirada para ligar: recorrido lento por la frente que baja despacio hasta la barbilla. La clave del éxito en esta mirada es el tiempo. Al mover los ojos por todo el rostro, no se intimida a la otra persona tanto como con la mirada intensa, y al hacerlo con detenimiento y sin prisas, dejamos ver que disfrutamos con lo que estamos viendo.
